Los desafíos de un país que se ha convertido en abanderado de un solo tipo de turismo, basado en sol, playa, música y ron. La República Dominicana busca un equilibrio en su oferta turística y ofrecer una propuesta sostenible que vaya más allá del resort y sus estereotipos. 

Fotografías de Fran Afonso

Suculento y espeso. Un caldo que cambia según las regiones. El sancocho es –o eso dicen– la sopa del pueblo en toda América. Y en el dominicano –también lo dicen– cabe todo. Incluso hay uno de siete carnes. Pero la imaginación y la creatividad del cocinero o, en la mayoría de los casos, lo que quede en la despensa, determinarán la mezcla final y el sabor resultante. República Dominicana, antes La Española y mucho antes Quisqueya, la Madre de las Tierras, es hoy un sancocho rico y variado, difícil de entender. Más difícil de explicar.

Las hileras interminables en la Avenida República de Colombia de la capital son ya una estampa estereot...


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