El Duero adopta sus formas más espectaculares a lo largo de esos 112 km en los que el río hace la función de frontera entre España y Portugal. Desde el monte sobre el que descansa Fermoselle divisamos los Arribes, esas paredes que flanquean y estrechan el río en su frenético descenso. En Ambasaguas el Duero se encuentra con el Tormes, formando un espectáculo de la naturaleza que Jordi Brescó capturó a través de una lente.
El Duero adopta su función fronteriza a lo largo de los Arribes. (c) Jordi Brescó
El río flota entre las montañas que lo flanquean en su paso cerca de Villarino de los Aires. (c) Jordi Brescó
El Tormes humea justo antes de encontrarse con el Duero. (c) Jordi Brescó
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