El surf ha sido, durante los últimos años, uno de los deportes que más rápido crecimiento ha experimentado a lo largo y ancho del planeta. Comenzó siendo un fenómeno costero que hoy en día ya se practica en algunos ríos, en los grandes lagos e incluso en olas creadas por el ser humano a cientos de kilómetros del océano. Este boomha provocado que la industria del surf haya crecido como la espuma en la última década. Lo que comenzó como la pasión de un puñado de hippies en Hawái y que la costa californiana convirtió en un icono, genera hoy en día miles de millones de euros en una industria floreciente que invierte en marketing buena parte de sus ingresos.Si bien esto suena a historia con final feliz, no lo es tanto, y la consecuencia es clara. Las playas se han abarrotado de gente sentada en sus tablas hasta límites insospechados. Muchos lo están probando por primera vez, otros lo hacen porque el vecino lo hace. Pero la gran mayoría lo practica porque les picó el gusanillo del surfing...
Este contenido es sólo para suscriptores.
Consulta aquí las suscripciones que te permiten acompañarnos en este viaje.
Si ya eres suscriptor, accede indicando tu usuario y contraseña aquí debajo.