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Carlos Bagur siempre enfoca su mirada hacia una misma dirección: el horizonte. Aprendió a hacerlo a base de correr el tramo norte del Camí de Cavalls, colocando señas de marcaje para las carreras deportivas que en él se organizan.
Además de ser el paredador de referencia de la zona de Ferreries, es un atleta nato y un fiel compañero de este sendero histórico que el turismo ha convertido en una ruta GR estrella. Su cariño al camino lo ha convertido en el único restaurador de losas de los tramos inclinados –colocadas en el pasado a modo de escaleras rústicas.
Carlos empezó a dedicarse a esta labor convocado por el Consejo Insular de Mallorca, la isla vecina. Desde entonces, su trabajo se ha centrado en Pla de Mar, Cala Pilar y Camí dels Alocs, tres espacios de la zona norte de Menorca que deslumbran con horizontes de belleza rasposa.

Tramo del Camí de Cavalls resta...


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