¿Alguna vez has viajado por alguna red de metro desconocida sin tener acceso a su plano? Sin un planificador de viajes on line es una situación complicada, ¿verdad?

Mark Ovenden lo sabe. Quizás hasta se haya perdido alguna vez por cualquier red de transporte de cualquier ciudad sin un plano que le guíe. Y puede que este fuese uno de los motivos que le llevase a reunir los planos de metro de las principales ciudades del mundo en el Atlas de metros del mundo (Nórdica libros y Capitán Swing, 2016). Sí, porque de momento, la cartografía de redes de transporte es para el usuario lo que una brújula para el explorador: imprescindible.

En total son más de 300. Este atlas es una recopilación de los planos de metro de las principales ciudades del mundo. Pero también es mucho más. Al incluir mapas antiguos es, además, un libro de historia. En sus páginas, se explica la evolución de varios sistemas de transporte subterráneos. No solo por expansión territorial, ya sea por conferencias, reuniones, ferias o por eventos deportivos, cuando una localidad se desarrolla lo hace a la par de su sistema de transportes, de manera que se retroalimentan y se dan identidad el uno al otro. «Los mapas de transporte dan cierto status a sus ciudades, de manera que este libro funciona como un directorio invisible en el que cada mapa es igual que un retrato, simplificado pero eficiente, de la ciudad que lo representa».

Pero no solo a las ciudades. Los planos también sitúan a los ciudadanos, sirven para posicionarnos en el espacio-tiempo. Y si no, ¿quién no ha contado alguna vez el número de paradas de metro que quedan para calcular el tiempo que falta de trayecto? o ¿quién no ha medido la lejanía o cercanía de un lugar según el número de paradas de metro que hay de por medio? Los planos, aparte de guías, son también unidades de medida que nos ubican en el espacio-tiempo.

Y para ello mezclan dosis de cartografía y de estética. Pero el resultado tiene que ser siempre el mismo: una aproximación de la realidad subterránea de una ciudad. No es posible una representación fiel, sería imposible una reproducción a escala entendible y bonita a la vez, además «la gente es más propensa a utilizar un mapa si le gusta».

Así que el Atlas de metros del mundo es también una obra estética. Es un libro que «celebra la evolución del diseño de los planos de transporte desde su origen hasta 2016, al tiempo que reconoce que el futuro de este formato no está ni mucho menos garantizado». ¿Acabarán los planificadores de viaje on line con los planos del metro?


ATLAS DE LOS METROS DEL MUNDO, MARK OVENDEN,  NÓRDICA LIBROS y CAPITÁN SWING, 2016